Los intentos de negociación de Casado, en nombre del Consejo de Defensa, fracasaron ante la negativa de Franco de acceder a nada más que la rendición incondicional de la República.
La Ofensiva de la Victoria llegó a la provincia de Ciudad Real de la mano del Ejército del Sur, comandado por el general Queipo de Llano, y el del Centro, del general Saliquet. El 27 de marzo de 1939, las tropas de Queipo tomaban Almadén: a partir de entonces, los ejércitos de ambos generales se extendieron por toda la provincia.
Dos días después, el 29 de marzo, las tropas victoriosas entraban en la capital, Ciudad Real, que sin embargo ya estaba controlada por sus simpatizantes. El día anterior, coincidiendo con la caída de Madrid, los quintacolumnistas de Ciudad Real habían salido a las calles y ocupado los edificios clave de la ciudad: las principales instituciones y medios de comunicación estaban en sus manos antes de que llegara el Ejército, lo que contribuyó a un traspaso del poder sin incidentes.
Autora: ACP