La fosa de Solana del Pino es un caso de las fosas individuales derivadas de emboscadas y asesinatos puntuales. La fosa tiene su origen el 12 de noviembre de 1943 cuando se produce el asesinato de un jornalero de Cabezarrubias del Puerto afiliado a la CNT, Antonio Ruiz Sánchez, de 31 años, enterrado en la parte civil del cementerio. En el Registro Civil se pone como causa de muerte lo siguiente: «a consecuencia de hemorragia interna, según resulta de diligencias militares». En la actualidad, la zona queda limitada por una capa de cemento, debajo de la cual se encuentra la fosa, lo que hace prácticamente impracticable su posible localización y exhumación.
En Ciudad Real, el número de fosas localizadas asciende a 62, en las que se han encontrado, según el Mapa Estatal de Fosas, 3158 cuerpos. Sólo el 4% ha sido exhumado al completo. Dentro de la provincia se aprecian marcadas diferencias en torno al tamaño de las fosas: mientras que la fosa de Ciudad Real alberga el 35% de las víctimas totales de la provincia, la de Alcázar de San Juan contiene 12% y la de Almodóvar del Campo se sitúa en tercer lugar con el 8% de las victimas, la mayor parte de las fosas suelen ser de pequeño tamaño y algunas de ellas contienen tan sólo los cadáveres de miembros de partidas guerrilleras ejecutados individualmente o en pequeños grupos. Además, de las fosas contabilizadas para la provincia de Ciudad Real, 7 fueron trasladadas al Valle de Cuelgamuros, antes denominado Valle de los Caídos.
Autor: RAL.