En Ciudad Real, el número de fosas localizadas asciende a 62, en las que se han encontrado 3158 cuerpos. Sólo el 4% ha sido exhumado al completo. La fosa del cementerio de Puertollano se encuentra en el cementerio municipal, ampliado a finales de la guerra con el objetivo de contener a las personas fusiladas entre junio de 1939 y noviembre del mismo año, aunque posteriormente se arrojaron tres muertos más producto de un fusilamiento el 9 de febrero de 1940 y de una emboscada a guerrilleros el 11 de enero de 1947. La fosa se abrió para albergar los cuerpos de los primeros cuarenta y dos fusilados en la tapia del cementerio el 13 de junio de 1939. Actualmente, según el Mapa Estatal de Fosas, se estima la presencia de un total de 113 víctimas.
El gran crecimiento de la población consecuencia de la creación de la Empresa Nacional Calvo Sotelo, llevó a la ampliación del cementerio de 1952 y se trasladaron los restos de la fosa, exhumación realizada sin ninguna medida científica ni de protección, aunque la presencia de familiares permitió la identificación de algunos restos.
Nada más llegar la democracia, la Alcaldía de Puertollano y agrupaciones como el PCE, UGT y CNT, buscaron crear un mausoleo en memoria de los fusilados, erigido finalmente justo donde se produjeron los fusilamientos, e inaugurado el 13 de junio de 1980, cuadragésimo primer aniversario del primer fusilamiento. Con la creación del mausoleo se llevó a cabo una segunda exhumación de los restos, pero, de nuevo, sin una metodología científica, lo que impidió en el año 2011 a la Sociedad de Ciencias Aranzadi llevar a cabo la identificación de los restos de Luis Ortiz de la Torre.
Autor: RAL