El Mapa de Fosas señala la presencia de cinco fosas en la localidad de El Carpio del Tajo (Toledo). De estas, tres aún no han sido intervenidas, una se encuentra desaparecida y una ya ha sido totalmente exhumada. Este último caso es el de la fosa del camino viejo de Talavera, también ubicada en la localidad de El Carpio del Tajo. Según la información proporcionada por la Asociación para la Recuperación de la Memoria Histórica de Cuenca, la fosa fue exhumada unos años después de 1936, cuando se abrió para enterrar a tres vecinos del pueblo que fueron ejecutados en octubre de ese mismo año, pero se desconoce el lugar al que fueron trasladados los restos. Las víctimas son Nicolás Bautista Hormigos (41), Mariano Palomo Torralba (22) y Nicolás Rojas Hormigos (40).
Toledo supone la segunda provincia de Castilla-La Mancha con mayor número de fosas comunes registrada en el Mapa de Fosas, aunque con los datos conocidos gracias a las investigaciones del equipo de Mapas de la Memoria de la UNED pasaría al tercer puesto. Existen 49 fosas en 32 localidades diferentes. Aparecen 16 fosas no intervenidas, 2 no intervenidas, pero dignificadas, 4 exhumadas parcialmente y una que además ha sido dignificada, 12 exhumadas totalmente (aunque la mayoría no ha sido de forma científica y en muchos casos solo un traslado al osario) y una dignificada; 2 han desaparecido y, por último, 11 han sido trasladadas al Valle de Cuelgamuros, antes denominado Valle de los Caídos. Más del 55% de las fosas no han sido intervenidas o han sido trasladadas al Valle de Cuelgamuros. Las cifras de la represión franquista en Toledo siguen sin estar claras, pero los estudios de la última década se acercan cada vez más en torno a las 5000, siendo la razia la forma principal forma de represión durante el conocido como “primer terror”.
Autora: LMC