La Paridera de Martín es un recinto realizado en piedra de 17X8 metros con un gran muro que hace de corral. Es un edificio destinado al ganado, pero que seguramente durante la guerra ya estaba abandonado. Es un emplazamiento utilizado por el ejército de los sublevados que estuvieron durante un periodo de tiempo muy corto, ya que se tiene la hipótesis de que estarían tan solo un día.
Las excavaciones realizadas durante 2012 han sacado a la luz varios vestigios de abril de 1938. Entre los más numerosos son 27 latas de sardinas y leche condensada. De material bélico se han documentado pocos restos de munición, siendo lo más representativos restos de peines Mauser, balas impactadas de Mosin Nagant y balas de pistola, lo que como en otras parideras hace referencia a un combate a distancias muy cercanas. Además, se han documentado gran número de restos de granadas Lafitte y de mortero. En el muro que actuaría como corral se han documentado más restos de peines, un cargador con 4 balas de Mosin Nagant y una navaja de bolsillo.
Este emplazamiento es abandonado por los sublevados, los cuales retroceden a una línea fortificada a pocos metros de distancia, y esta paridera queda en tierra de nadie. En esta huida por parte de los sublevados, se tiene constancia de que al menos perdieron un hombre que fue enterrado en las inmediaciones del muro, pero es solo un testimonio oral, ya que por ahora no se han hallado sus restos.
Autor: GRM