El dolmen de Azután es una estructura megalítica que data del neolítico medio (V milenio a.C.). Esta estructura compuesta por grandes ortostatos se localiza en las inmediaciones del Km 17 de la carretera CM-4100 a poca distancia del puesto de mando de las Jariegas. En el contexto de la Guerra Civil, en este lugar y aprovechando las grandes piedras que afloraban, el bando republicano decide emplazar un nido de ametralladoras con el fin de controlar la zona. Para ello, se realiza una trinchera auxiliar para que los soldados puedan acceder a el de una manera más segura. Debido a ello, y al removimiento de tierra el dolmen sufre daños estratigráficos.
La construcción de este enclave se da en el contexto del frente sur del Tajo, cuando en 1938 el bando sublevado lanza una ofensiva para romper la línea de frente en la zona de Extremadura. En este año y con el avance de la 19 división franquista desde el cercano pueblo de Puente del Arzobispo hace que las tropas del 181 batallón de la 29 división de la 46 brigada mixta bajo el mando del Teniente Coronel Alfaro Siqueiros retrocedan, consiguiendo el ejercito sublevado romper el frente tomando Azután y dibujando una línea de frente que se mantendrá hasta el final de la guerra.
Tras las excavaciones realizadas en el dolmen por Bueno Ramírez en 1981. Se han conseguido documentar vestigios de la guerra civil, entre los más abundantes son los restos de munición. En este caso se han documentado vainas, balas y peines procedentes de rusia al igual que en el puesto de mando, correspondientes con armas como el fusil (Mosin Nagant) y calibre (7.62 mm).
Autor: GRM