El bunker de Abares es una posición fortificada localizada en el margen de la carretera que une Seseña con Sesena la Nueva. Es una posición levantada por el bando sublevado a finales de la guerra, en 1939, está ubicada en llano, junto con otro bunker ya desaparecido, tendría la función de controlar Seseña hasta la Cuesta de la Reina. Se trata de una construcción realizada en hormigón formada por varias partes diferenciadas. El cuerpo central presenta una fisionomía cuadrangular de 5×5 metros con 4 troneras a cada lado para tiro con fusil y ametralladora. En sus esquinas Noroeste y Sureste se levantan unas prolongaciones semicirculares de unos 3 metros de diámetro con 5 troneras, lo que haría de esta posición un enclave prácticamente inexpugnable para la infantería. Esta última posición semicircular orientada al Sureste se encuentra en peor estado ya que ha cedido en el terreno y presenta a grandes fisuradas, debido posiblemente a una explosión en su interior. La cubierta es de hormigón y no es abovedada. En la fachada Sur se encuentra la zona de acceso que hoy en día se encuentra colapsada por lo que es posible acceder al mismo arrastrándose.
En la actualidad el bunker presenta unas buenas condiciones generales, llegando en algunos puntos hasta los 2 metros de altura, convirtiéndose en uno de los vestigios más llamativos de la zona. Esto es debido gracias a que es una construcción muy tardía y el pelotón destinado a esta poción no sufrió bombardeos ni ataques por parte del ejército republicano.
Autor: GRM